De entre las labores que las personas podemos hacer para ayudar a la fauna salvaje y mejorar el estado de nuestros bosques, que son la misma cosa, esta la restauración de suelos. En especial si el área en cuestión ha tenido agentes externos que han modificado las pirámides alimenticias y la vegetación.
Restaurar un bosque es dejarlo en paz: Un bosque que ha sido dañado por agentes externos puede restaurarse de varias maneras. La mejor es dejarlo solo y el mismo bosque se regenera. Dejemos al bosque en paz por un tiempo y todo va a ir bien con él, por si mismo es auto sustentable. En caso de incendios o muerte de parte de su arbolado, el bosque tiende a recuperarse con el paso de los años, no necesita reforestación o fertilizantes. Sin embargo, como seres humanos tenemos la capacidad de reconocer el comportamiento de la naturaleza y así acompañarla en sus procesos, en este caso el proceso de restauración de bosque puede ser apoyado iniciando con la retención del suelo para evitar erosión
Los ambientalistas mas entusiastas pueden ayudar a la naturaleza directamente. Bajo la máxima de solamente intervenir en la naturaleza por medio del trabajo directo siempre bajo practicas sustentables. Trabajar en el campo con fines de restauración es una tarea compleja que debe llevarse a cabo bajo la dirección de personal capacitado. Ayudar a los árboles jóvenes es una labor sencilla que requiere de poco esfuerzo y de gran ayuda. De acuerdo a la inclinación y al tipo de suelo se puede hacer un bordo que ayude a la captación de agua por un lado y por otro retener el liquido y evitar el deslave. Parecido a un cajete como los que conocemos en los jardines urbanos pero considerando la inclinación, la vegetación y el tipo de suelo.
Retención de suelos. La erosión del agua y del viento es un agente de destrucción de bosques. Sobre todo en lugares que han sufrido incendios, sequía o sobre pastoreo. En este sentido lo que se hace es crear barreras con el material orgánico del piso como piedras, ramas secas y árboles caídos. Con el material disponible se crean barreras que disminuyan la velocidad del agua y retengan las hojas secas. Estas barreras además de detener la erosión, propician la absorción de agua.
Obras mas complejas como canales son más efectivos al proteger la erosión de los suelos y retienen una importante cantidad de agua. Estos canales requieren un equipo interdisciplinario de biólogos, forestales e ingenieros ambientales. El propósito es construir el canal siguiendo las curvas de nivel, es decir se elige una cota (altura) y se cava siguiendo la curva de nivel, una zanja de menos de medio metro que se extiende por decenas de metros. En época de lluvias estos dispositivos frenan el agua y gran parte es retenida para ser absorbida en zonas que normalmente retienen poca agua. Otra modalidad es construir pequeños muros de piedra barreras a modo de represa, de una altura menor a los 40 centímetros.
La reforestación es una opción que debe ser realizada únicamente bajo estricta supervisión profesional de personal familiarizado con la flora y fauna local. Un desastre ecológico sucede en la zona llamada del aeropuerto, dentro del Bosque de la Primavera donde en los años noventa se realizo, con mucho entusiasmo y escaso conocimiento, una reforestación masiva, en un área núcleo importante, utilizando especies ajenas al bosque. Esto ha propiciado 15 años después, un desequilibrio difícil de cuantificar. Al agregar árboles de especies ajenas se disparan riesgos impredecibles como el crecimiento de plagas, muerte de especies nativas y aumento en los riesgos de incendio. Ahora quedan pocas opciones, una es realizar un tratamiento hormonal periódico a los especimenes que entran en edad reproductiva para evitar su propagación. Esta opción es muy costosa ya que estos tratamientos se tendrían que hacer cada año. Sin embargo la mejor opción es talar todos los árboles ajenos a las especies nativas, que en este caso incluyen casi la totalidad de árboles reforestados.
En contraste tenemos la reforestación del Parque Nacional Volcán Nevado de Colima. Se crearon dentro del parque 3 viveros, únicos en su tipo, donde se producen árboles nativos que al ser sembrados en el mismo parque están ya aclimatados a las condiciones de altura y metereológicas de la zona. Los 3 viveros de alta tecnología producen anualmente 40,000 árboles campeones de Pinus hartwegii. El vivero de la Joya tiene producción de 20,000 árboles y Pico del Águila I Y II ambos con producción de 10,000 árboles para un total de 40,000 árboles anuales. Han sido operados por varios años bajo supervisión del Biólogo José Villa, director del parque nacional, y su impecable equipo de trabajo. Los viveros tienen un costo aproximado de $1,400,000 pesos.
La innovación de los viveros del parque es tal que tiene los mejores viveros forestales alpinos de México. A la altura de la tecnificación de los mejores viveros de Alemania y Austria. Entre la innovaciones esta el tipo de contenedor voluminoso de 1, 5 y 50 litros de capacidad, en general es todo un sistema de monitoreo de nutrientes de los árboles con un equipo científico que opera con un laboratorio propio, único en México.
El resultado son 40,000 árboles anuales, grandes, con raíces potentes y excelentemente nutridos que les permite sobrevivir en las peores condiciones de pobreza de suelo del 100% e incremento en biomasa del 250% en un año. Bajo este sistema hemos plantado 240,000 árboles en 10 años.
El proyecto el Parque Nacional Volcán Nevado de Colima ha sido tan exitoso
que esta por replicarse en el Pico de Orizaba y otras montañas de México.