Era una caminata nocturna sin expectativas, en las inmediaciones del bosque de la primavera. Esta actividad de exploración nos ha llevado a los miembros de Aura Jaguar desde hace mas de un año por lugares alejados y poco frecuentados del bosque. El objetivo principal es evaluar el estado del bosque y detectar huellas de mamíferos, en especial felinos. Por eso la hora de inicio fue las 8:20 pm, para aumentar la probabilidad de ver algún animal en su hábitat natural. Sabemos que la mayoría de los habitantes del bosque son nocturnos, así que al andar a oscuras aumenta las probabilidades de un avistamiento.
La escasa luz dejaba ver un sendero, entre las hojas caídas de encino había un claro con restos y fragmentos de huesos indistinguibles, quizás un Coyote o Puma sería responsable.
Avanzando sigiloso entre las hojas húmedas de encino, en solitario, mezclado con las sombras del bosque y de vez en cuando aquellos leves crujidos de las hojas húmedas. Por seguridad es recomendable ir acompañado
En un tramo que se pudo recorrer en silencio, donde el terreno permitió avanzar como si fuera flotando prendí la lámpara. Apenas la segunda vez que lo hacía ¿Se escucho algo? ¿percibí algún movimiento? Ahora no recuerdo porque lo hice en ese momento.
Delante había un reflejo a nivel de piso, a unos 30 metros, la lamparita de LED no daba para mas ¿sería una lata? ¿Los ojos de un sapo? Me quede quieto. Esta fue la primer prueba de la noche, aguante sin moverme unos 10 minutos. El ambiente se relajó y a mi derecha escuche pisadas. Apenas gire mi cabeza delate mi presencia. A mis tres algo salio a toda velocidad apunte la lámpara y apenas pude distinguir un animal gris a toda carrera. Pense - Es un coyote.
Dirigí la luz a los ojos de enfrente. Ahora estaba seguro que eran otros dos individuos, quizás cachorros. Otra larga pausa, otro duelo a quedarse quieto. Una vez que las criaturas se sintieron seguras comenzaron a moverse, pude ver que sus ojos estaban demasiado juntos para ser coyote.
Tenia al menos dos al frente y por lo menos uno a mis espaldasí. Subí a un árbol para ocultarme y descartar una posible embestida. Estos animales de aspecto bonachón son valientes y muy bravos si se sienten amenazados, especialmente cuando hay crías presentes.
Arriba del árbol el tiempo se alargo, a pesar de no estar muy cómodo y de sentir algunos insectos quieto y en silencio. Nada se escucho por un buen rato. Un jet interrumpió el silencio, el ruido de las turbinas vino y se alejo y todo siguió en calma. Dudaba -Sería que huyeron cuando trepe y no los escuche? Sin embargo estaba dispuesto a quedarme horas, aunque lloviera, a oscuras, como gato al asecho.
Después de una espera interminable, en la que extrañaba mi hamaca. Sentía algún calambre. Se escucharon ruidos en la misma dirección. Era el final del tercer round y todo parecía que avanzaban hacia mí. Se pusieron en movimiento, se acercaron lenta y directamente a la base del árbol, curiosos de oler que cosa había aparecido y volado por ahí. Escuchaba sus pisadas y algo de su respiración, sabía que estaban a unos metros pero no los veía. No quería prender la lámpara para no espantarlos. Distinguí sus siluetas claramente cuando llegaron a unos 4 metros del árbol. Pecari de collar.
Encendí la lámpara y apenas reaccionaron. Inspeccionaban entre las hojas buscando insectos o plantas. Eran tres adultos. Podría saltar sobre ellos. Decidí sacar el celular, maniobra difícil en mi posición, tome tres fotos y dos minutos de video de baja calidad.
Sus collares eran tan claros como en las mejores fotos que hemos tomado en otras partes de la Primavera, solo que en vivo son magníficos. Sus pesuñas estan adaptadas para caminar sin hacer ruido. Son delgados, adaptados para caminar entre arbustos. Aunque la nariz es chata y circular no están relacionados con la familia de los puercos ni jabalies europeos. Son originales de América, tambien llamados javalinas, jabatos o hasta jabalies. Hasta hace menos de un año había expertos en fauna que afirmaban que no había Pecari en el Bosque de la Primavera
Tomaron rumbo para reunirse con su compañero. Con toda calma y a ritmo constante. Sus pasos se tornaron lejanos y desaparecieron inevitablemente en la negra noche. Baje el árbol y emprendí el regreso. En algun aura nocturna volveremos a vernos, Pecari.
Aura Jaguar esta trabajando en un proyecto ecológico que favorecerá, principalmente, a Venados Cola Blanca y Pecaris del Occidente de México. Eslabones clave en el ecosistema de nuestras sierras. José Luis Leyva es miembro de Aura Jauar, A.C. trabaja en el equipo de Guajalajara.